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Ancelotti es, no lo olvidemos, apuesta personal de Florentino

21 agosto 2024

18 Aniversario

El 20 de agosto de 2006, en plena edad de oro de los blogs, se me ocurrió hacerme un autoregalo de cumpleaños especial: hacer un blog: Todo Real Madrid.

 

Este blog me ha ido acompañando a lo largo de estos 18 años, en el que hemos tenido épocas de enamoramiento absoluto y que ha ido cayendo, a mi pesar, en un lento descenso al terreno de la apatía, en buena parte debido al auge de otros medios de difusión (Facebook, Twitter, etc..) y por otra parte a mi propia desgana.

 

Aquella época de efervescencia del mourinhismo sacaba mi mejor vena combativa, para luchar contra aquello que algunos veíamos como algo inaudito y que hoy, tras el descubrimiento de la corrupción de Negreira, se explica, aunque de forma parcial. Aún queda por descubrir cómo se trasplantó el sistema de España a Europa, que estoy seguro que así se hizo. Quizá esa corrupción nunca vea la luz, aunque siempre defendí que gastarse unas decenas de miles de euros en investigar a Ovrebo por buenos detectives darían unos abundantes frutos.

 

Y hoy, con la barriga plena de títulos, disfrutando de la segunda edad de oro del madridismo, me es mucho más difícil apelar a las musas, por lo que se muestran más esquivas. Sirva en mi descargo aducir que tampoco tengo demasiado tiempo libre. Y me entristece el olvido de esta página blanca en blanco, mucho, pero ya no voy a caer en la tentación de prometer más asiduidad, pues soy persona de palabra y ya he faltado a ella en varias ocasiones.

 

Pero pese a esto último, hoy, que es un día especial para mí, si quiero rememorar viejos tiempos, emborronando esta página blanca con mis reflexiones. Reflexiones sobre el madridismo, el fútbol y como yo lo veo.

 

Y por eso, hoy es día de volver la vista atrás, a las entradas más antiguas, para darnos cuenta de la abundantísima cosecha de títulos y, sobre todo, fortaleza institucional del Real Madrid. Hoy sienta muy bien, como diría Courtois, sentirse en el lado bueno de la historia. Y aunque lo que el cuerpo pide hoy es arrellanarse en un butaca vip del Bernabéu, acariciando un gatito en el regazo, contemplando la magna obra mientras disfrutamos de esas trombas eléctricas de la jauría blanca, no podemos olvidar aquel viejo adagio: Memento mori.

 

Si algo enseña la vida es que lo bueno nunca dura mucho. Por lo que mi consejo para todos es que disfrutemos de lo que la vida nos brinda, agradezcamos las victorias, suframos los empates y olvidemos pronto las derrotas. Y si viene algún título, que vendrán, celebrémoslo como si fuera el último o la Séptima.

 

Diez sexenios. Siempre Hala Madrid.

 

05 mayo 2024

Liga 36: La leyenda continúa…


 Real Madrid 3 - Cádiz 0 

El Madrid ganó la Liga 36 como al desgaire, casi con desgana. No sabiendo si era mejor ganarla o esperar a Granada, para así poder hacerlo en el césped, como corresponde. Y todo por obra y gracia de Tebas, ese madridista (sic). 

En la primera parte el Madrid B acusó lo que nos acusa a todos a esas horas, una somnolencia culpable, pues sabes que tienes que luchar contra ella como es tu obligación, pero a veces ella, pertinaz, gana la batalla. En la segunda, ya recuperados con un chorro de agua fría, se tomaron el partido como era su obligación, haciendo que el Cádiz, ese equipo tribunero, sinvergüenza y sin gracia, supiera que ojalá el año que viene nos ahorremos su visita a este templo de grandeza y señorío. 3-0 y al carrer. 

Y con la victoria se volvió a ver esa apatía única ante una victoria final distinta de la Champions. Se ganó, los madridistas desfilaron ordenadamente para sus casas, los jugadores se ducharon, sacaron a los niños a jugar al césped y, después, con el 3-2 de Miguel - ese merengue en el exilio -  ya subieron al palco a ver en directo el prodigioso 4-2 de Portu. 

Y ahí, en ese momento, con el Barca en caída libre como corresponde, el madridismo se desperezó; unos pocos cientos, valientes y bullangueros, se apiñaron frente al Ministerio de Agricultura, lanzando de lejos sus vítores a la señora Cibeles. Y los jugadores celebraron en la intimidad, alegres pero sin exuberancia, como si fuera la jubilación de un compañero querido. 

Celebraron ocultamente un campeonato sin la celebración que se han ganado justamente. Celebración que, insisto, el pérfido Tebas aguó rastrera y corruptamente, no cambiando el orden de los partidos o haciéndolos coincidir. Fútbol for the fans… Jódete. 

 Espero que Florentino añada la ofensa a su larga lista. 

Sin embargo, espero que lo frugal de la celebración no nos haga olvidar el gran éxito conseguido. Son 36 Ligas, son muchas y me temo que menos de las que merecimos, pues nunca, nunca, olvidaremos las dos décadas oscuras y corruptas en que el Barca ensució la Liga y el fútbol español con su vergonzoso pacto con Negreira y el CTA. 

Pero lo mejor de la Liga 36 es que todos sabemos - y quizá sea esa la razón principal de lo vivido esta tarde plácida - que pronto, muy pronto, la 37 estará aquí. Y la 38, y la….. Pronto, muy pronto. Pues este equipo es leyenda. Y la leyenda continúa. 

Me gustó: Brahim. Que acierto su retorno. Siempre infatigable. Siempre vertical. Siempre transparente a De la Fuente….

No me gustó: Sé que son cosas de la chavalería, a la que hay que disculpar por sus pocos años, pero en las celebraciones del Madrid NO nos acordamos de nadie… Caca.

Pepito Grillo: El departamento de comunicación, de nuevo, ha vuelto a fallar. El Madrid debería haber forzado pidiendo el cambio de horarios para celebrar en su casa. Y obligar a que le entreguen la copa a domicilio. Es el lunar de Florentino. 

Franciscus: El miércoles sonreiremos. Después de la congoja, pero sonreiremos.