Frontispicio
27 marzo 2011
ABIDAL ,LA ÑOÑERÍA Y LAS DIFERENCIAS
20 marzo 2011
EL PERRO MORDIÓ AL HOMBRE
Atlético de Madrid 1 – Real Madrid 2
El miércoles se clasificó para cuartos de final de Champions. Algo que pudiera parecer novedoso por los aciagos últimos años, no lo es para el mejor equipo de la historia de la competición. Para el Real Madrid es natural verse en cuartos, lo contrario es que el hombre muerda al perro.
Ayer con el derbi madrileño, más de lo mismo. Que el Real Madrid gane al Atlético es lo normal. Lo noticiable es lo contrario. También, visto lo visto, hubo más normalidades. Que los colchoneros volvieran a quejarse del árbitro (todos los partidos igual), que la grada en general insultara gravemente a la madre de Cristiano, que se menospreciara ser de un país vecino, que se llamara mono a un jugador blanco. Que Cristiano fuera titular. Lo normal.
Y todas estas muestras de normalidad deberían evitarse. Las que cuestionan la educación por mor de ella misma, y que Cristiano, estando lesionado, sea titular perjudica al Madrid. Máxime cuando la alineación acarreó una recaída innecesaria de su lesión, que cuestiona su participación en la ida de Champions.
Y ese hecho podría poner en peligro la hoja de ruta de Mourinho. Ayer viendo el partido, en un rato de ociosidad dentro del aburrimiento de la segunda parte, se me ocurrió que Mourinho en julio debió de plantearse su libro de ruta para la temporada. Y en ese libro de ruta, jalonado por hitos importantes, nos diría que a mediados de marzo el Real Madrid debería de estar justamente donde se encuentra: en la final de Copa, en cuartos de Champions (siendo el mejor equipo del torneo) y vivo en la Liga.
Por ello proclamo hoy desde aquí mi satisfacción por la temporada hasta la fecha, asumiendo que las comparativas con Pellegrini (que no he sabido nunca a que venían) pasen a mejor vida, sepultadas en el olvido y esperando que abril, ese mes lleno de lluvias persistentes, nos bañe de éxitos. El reto es apasionante.
Me gustó: Benzemá sigue empeñado en su transformación de minino a tigre bengalí. Su gol hizo que el Calderón pusiera la misma cara que una vieja en un PC City. Y Özil, ¡¡ que clase tiene el chaval !!.
No me gustó: Los gritos del Calderón contra Cristiano y Marcelo. Si quieren aspirar a ser una afición señora deberán corregir estos comportamientos. Los árbitros deberían reflejar dichos insultos en el acta.
Tampoco me gustaron las alusiones a Florentino Pérez de Guardiola en el asunto del dopaje. ¿No le ha dicho su presidente (su supuesto jefe) que el señor Pérez le transmitió de forma personal que el Madrid no tiene nada que ver con el asunto, no tiene ninguna intención sobre el particular y nadie puede arrogarse la representación del Madrid sin su consentimiento?. Madriditis.
Pepito Grillo: ¿Quién osa hoy proponer vender a Benzemá por veinte millones (se ha dicho muchas veces) y pagar 45 millones por el Kun Agüero?
Rappel: Semifinales de Champions a la vista contra culés varios. ¡¡ Que gozada ver repetidos los goles de Zidane y McManaman de la última !!
Foto: Corazón Blanco
13 marzo 2011
MININO Y MÍNIMO ESFUERZO
"Víste Manolito, con un par"
Real Madrid 2 – Hércules 0
Con ese ánimo previsor Mourinho compuso una alineación que admite tres tesis doctorales. Deja claro sus preferencias por la dupla portuguesa en la zaga, con Cristiano hace suya la teoría Corcuera ( aquel ministro que indicó que los experimentos se hacen en casa y con casera), y nombra a Alonso mariscal de campo plenipotenciario, aunque al final acabara exponiéndolo un breve período sin necesidad.
Y tras el análisis evidente y maximalista, también nos indicó que considera a Granero, hoy por hoy, suplente de mariscal, que no es poca graduación. Y que no hay perdón para Pedro León, que Canales, una vez repuesto físicamente, cuenta con su aliento y perdón y que, pese a su achacado ánimo defensivo, le gusta jugar con dos nueves y hace ostentación de ello. ¿Qué pasará cuando vuelva el Pipita? Bendito problema.
Y así, al tran tran, buscando el par motor, el Madrid deambuló en la primera parte, con un apático y permanentemente desubicado Lass, con un Di María obsesivo, nervioso, percutiendo como ariete permanentemente y obviando a los compañeros y, ya tenía ganas de decir esto, con un Granero y un Benzemá sobresalientes. Uno en su mando sobre plaza y el segundo en su continuo ofrecimiento, pleno de detalles, de gestos, de pases de gran futbolista. Adebayor ha tenido el mérito de ser el acicate que aleje, esperemos que definitivamente, a Benzemá del autismo en que parecía querer vivir, y en hacer honor a su diminutivo cariñoso de Manolito.
Y aunque con el marcador favorable, se le concedieron al Hércules más mercedes de las que merecía, lo que motivó algún motivo de crítica del respetable, que se deja sus buenos euros para ver un espectáculo de primer nivel y no la escenificación de ensayo. Y fue por ello que Casillas hizo lo mejor que sabe, dos paradas magníficas que por usuales y habituales no parecieron vitales sino de trámite.
La segunda parte ya indicó desde su primer minuto que no iba a ser igual, que la lasitud y deferencia se habían acabado, y aunque no fuera efervescencia, si fue un contenido esfuerzo en amasar la victoria con la eterna receta estudiantil del mínimo esfuerzo: dejar para lo último lo obligatorio y hacer hincapié en sólo lo fundamental. Y así el minino Benzemá terminó con el Hércules a la manera de su admirado Ronaldo, regate corto, tiro seco, cruzado y ajustado. Gol de bandera.
Me gustó: Que Canales vuelva, poco a poco, al redil y a la senda de tener minutos, poco a poco. Y Benzemá, magnífico partido el suyo. Y el aplauso a Portillo.
No me gustó: Di María y Lass. El primero chupón y apresurado, el segundo plácido y lento, creerán que lo tiene seguro ante el Lyon. No apuesto por ellos.
Pepito Grillo: La presidencia arropa al entrenador. Este gesto siempre es bueno, con independencia de sus moutivaciones. Ya le hubiera gustado a Pellegrini un pronunciamiento tan franco a su favor. Técnico arropado igual a confianza en el proyecto. Y el senado blanco aplaudió convencido. Yo me uno.
Rappel: Lisandro, próximo palangana, dará aliciente pero no amargará la clasificación, holgada y tardía, del Madrid para cuartos, donde me pido el Schalke 07.
Foto: Corazón Blanco
03 marzo 2011
El jardín de Mourinho
SE EQUIVOCÓ MOURINHO
Sin embargo, tiene la cuestionable costumbre de meterse en charcos sin necesidad y entrar en jardines ajenos como elefante por cacharrería. Esto del jardín viene a colación de su último comentario sobre si Guardiola vivía en un jardín idílico o no, arropado por los medios afines de Barcelona y rodeado de un aura benéfica, incorpórea y cuasi metafísica.
En este punto no está de más recordar rifirafes recientes con otros colegas de profesión, con algún jugador, árbitro o periodista. El comentario de ayer sobre Pellegrini me parece abominable, barriobajero, ventajista y, lo que es peor, innecesario. ¿A cuento de qué vino semejante estupidez?
Y si sumamos despropósitos, no podemos dejar aparte las ya sobrevenidas de las Ligas donde ha realizado su labor en el pasado. Y el problema es que, aunque la mayoría de las veces tiene la verdad y la razón de su parte, no hay que olvidar que la educación y la urbanidad van muchas veces aparejadas del disimulo y la diplomacia. Y el señorío se nutre como savia fresca de esas dos virtudes. Y en cuestión de señorío el Real Madrid es su epítome y culmen.
Como es obvio, aunque sepamos que un compañero, vecino o familiar sea avaro, ludópata, impotente o feo de narices, no es de recibo darle pábulo público y menos cuando en ocasiones nosotros también hayamos cometido ligerezas también reprobables y que pudieran sernos afeadas en nuestra cara.
Si siguiéramos su escuela de comportamiento, éste comportamiento sería equiparable a los niños de preescolar, en los que la tolerancia es inexistente y esta sustituida por la exaltación de la verdad terrible y tronante.
Como deseo lo mejor para Mourinho y el Real Madrid, ruego a Florentino que ponga los medios, económicos y serviles, necesarios para que Del Bosque encuentre un hueco entre una recogida de premio y otra, y así pueda destinar un par de tardes para impartir a nuestro entrenador teórica sobre señorío, diplomacia, prudencia y carácter madridista.
Aunque Zapatero no aprendió economía en dos tardes, y a la vista está, no pierdo la esperanza de que Mourinho, como alumno aplicado que es, saque Cum Laude en la asignatura. Amén.