ME GUSTA EL FUTBOL

Real Madrid 3 – Sevilla 2

Dudé mucho a la hora de elegir titular. Me gustaba mucho “Pellegrini galáctico” y otros tan manidos como “Líderes” o “Remontada”. Había otro bueno como “Rafalazo a la liga”. Pero elegí este “Me gusta el fútbol” porque resume a la perfección lo vivido esta tarde – noche.

Llegué un poco tarde al pub, el Almería ya iba ganando, o sea que subí ilusionado ante la perspectiva, pero a pesar de haber pronosticado el empate del Barca y la victoria del Madrid no esperaba que se produjeran de la forma que lo hicieron.

Cuando terminó el partido en Almería ya había comenzado en el Bernabeu. Olíamos el liderato. Mi amigo Paco, culé optimista, me decía al oído que no había problema, que el Sevilla iba a ganar. Autogol. 0-1. Ya te lo decía yo me codeaba. El Madrid no acaba de controlar, se apresura, aprieta pero sin firmeza. Higuaín está lejos del área, Cristiano no acaba de aparecer y Kaká, por desgracia, sigue en su línea. Gilifalta kilométrica y anda despeja tú que a mí me da la risa. 0-2. Brazo por hombro, tranqui tío, todavía estáis a un partido, me decía conciliador, serio el gesto y chispeante la mirada. Yo, con ánimo dubitativo, dudaba como San Pedro en la noche que el gallo cantó tres veces.

Y empezó el fútbol. El Bernabeu, como público sabio, se arremangó. No esperó, como muchas otras veces a que los suyos los animaran y animó él. Y esta alianza nunca falla. Cristiano se agitó como sólo él es capaz de hacerlo, Higuaín tiró de jerarquía, Marcelo empezó a amortizar su renovación y llegó la estrella del partido: Pellegrini. Expuso ante sus detractores y en el peor momento posible su libro de estilo. De perdidos al río, pero con el fútbol por delante. Quitó jornaleros y completó con artistas, peloteros, jugones, amantes del jogo bonito, como ustedes quieran. Y el fútbol renació.

¡¡ Y que fútbol!! Eléctrico, vertical, toque, desmarque, presión total, hombría sin desmayo, ataque sin descanso, lujos constructivos, fé en la victoria, espíritu ganador. O lo que es sinónimo: REAL MADRID.
Para que el cuadro estuviera completo, quitamos del ángulo muerto a un posible figura y colocamos a otro sinónimo de madridismo. Entra Raúl. Está terminando. Si. Pero es un icono, un ejemplo a seguir. Y los contrarios lo saben.

Con el cuadro completo, perfecto, sólo cabía esperar lo que era de ley que sucediera. Minuto 92. 3-2. Salto, alegría y contento para casa. Con la imagen perenne en la retina de la piña de todo el equipo en el centro del campo. Si el fútbol es un estado de ánimo, los madridistas tenemos los biorritmos por las nubes. Mi amigo se fué cabeceando y cabreado con la “suerte que tiene este Madrid” (sic).

Se confirma la tendencia. Se confirman los tópicos: 90 minutis en el Bernabeu son molto longos.

Me gustó: Al césar lo que es del césar, Iturralde hizo un muy buen arbitraje. Aunque me cueste reconocerlo.

No me gustó: Otra vez Kaká. El Madrid se gastó una pasta en su fichaje para que decidiera partidos, no para que acompañara al resto. Espero que el miércoles asuma su responsabilidad.

Pepito Grillo: ¿Dónde están aquellos que pedían a primeros de Liga un estilo definido para el Real Madrid? Si, aquellos que pedían que se mirara en el espejo del Barca. Al final el Ingeniero va a resultar clarividente. Por supuesto que el Madrid no tiene que mirarse en el espejo de nadie. Este es su estilo, y este el estilo que maravilla y enamora a todos los públicos desde hace más de cien años.
Otra más, que hoy estoy vengativo. ¿Qué ve el Barca cuando mira por el retrovisor? ¡¡ Al Valencia!! Ojo que llega el Guaje el domingo. ¡¡ Que miedo!!. Cagómetro, (ya estoy viendo la contraportada del As el lunes, casi la única página recomendable, junto a la crónica de Trueba , de toda la prensa española.

Rappel: El miércoles, ¡ay el miércoles! Pasamos. Como hoy, apretando pero p’adelante, que así sabe mejor.

Foto: Diario As