Barcelona 2 – Real Madrid 1
No lo pude ver. Además
preferí no escucharlo, no seguir Twitter, no saber nada. Al final fueron
llegando quién si lo vio y unanimidad en la información: el resultado 2-1 y
robo. 1, 2, 3, 4, 5 ......... Todos lo mismo.
Bueno, tampoco es para
sorprenderse ¿no? Pero como soy cauto por naturaleza y discípulo aventajado del
apóstol Tomás, no creo hasta que no veo. Esta mañana, gracias a la magnífica
página Real Madrid Play, pude verlo con toda comodidad y, pese a conocer el
resultado, Undiano logró sacarme de mis casillas en el apartado disciplinario,
una de mis debilidades. Aún sigo preguntándome como Alves consiguió terminar el
partido sin tarjeta ni en base a qué amonestó a Marcelo por llevar a caballito
a Messi. Parcialidad.
Pero no pienso hablar de
robo, ni escándalo, ni atraco ni zarandajas de esas, para eso están otros. Hoy
me limito a analizar lo que vi, y lo que vi me gustó. El Barcelona hizo un
partido muy, muy mediocre. Sólo contó con dos aliados: la diosa Fortuna y la
parcialidad arbitral. Son dos buenos aliados, que duda cabe, pero cuando son
los principales argumentos del fútbol al final suele salir caro. El Barcelona
más gris de los últimos diez años se llevó un partido que no mereció ganar,
quizás ni empatar. Poco bagaje futbolístico, fiando todo al talento de Iniesta
y a un voluntarioso Neymar. Sólo eso. Por perder, han perdido hasta la
identidad futbolística.
Esos socis que presumían
de que el modelo de posesión era innegociable supongo que dejarían anoche
regueros de sangre en las aceras del Camp Nou, producto de cortarse las venas
cuando vieron que el Barcelona define sólo al contraataque, cede el balón, la
posesión y hasta las Filipinas al rival, todo ello en el santa sanctorum del
tiquitaca y la posesió.
Por el contrario, el
Madrid me gustó. Y su entrenador también. Tranquilos, esperen un segundo antes
de tirar tomates.............. Ancelotti se equivocó en la alineación inicial,
si. Pero también el primero que se dio cuenta fue el y tampoco era un
experimento tan novedoso ¿verdad? Espero que ningún mourinhista critique el “experimento”,
porque sería tan irónico como mezquino. Carlo se equivocó, rectificó, cambio
sus cartas y pudo ganar perfectamente el partido. A eso siempre se la ha
llamado cintura y buena praxis de entrenador.
Pero contra los elementos no se puede luchar y
la derrota pírrica da buena muestra de ello. Yo, que soy optimista
antropológico, os recuerdo que el primer clásico de Mou terminó con Piqué
enseñando la mano en que guarda el as de picas......... y ya vimos como terminó
la cosa: con el Nou Camp temblando como hoja otoñal cada vez que el Real Madrid
pasaba por allí. Carlo ha empezado mejor y terminará mejor aún, al tiempo.
Estamos a seis puntos,
pero soy más optimista que antes de empezar el Clásico. Creo que el Madrid ha
salido más fortalecido del Clásico que el Barcelona. Y todo esto sin fumar nada
ni beber, ojito. Como dijo Alfonso Guerra en el 96, lo de ayer fue una dulce
derrota.
Me gustó: Modric, esplendoroso.
Partidazo el suyo. Muy bien además Pepe, Khedira y Carvajal. Y los cambios del
míster, adecuados, en tiempo y
decisivos. Illarra ya luce barba, así empezó Alonso y es hoy un hombre con toda
la barba.
No me gustó: El experimento Ramos.
Si el de Camas cuando están sólo dos se encarga siempre de repartir trabajo
para quedarse el sin ninguno, cuando está rodeado de cuatro, ni te digo.
Desubicado, sobrado y poco inteligente. Bale tampoco aportó nada, creo que aún
no sabe ni donde ponerse, se le ve muy voluntarioso pero acaba como el
sacristán en una película porno, no sabe si participar o no estorbar. Di María
muy fallón y a Marcelo sólo le faltó pedir una hamburguesa, vago hasta la
extenuación.
Pepito Grillo: Resulta que el Tata
Martino se enteró de la alineación del Madrid dos horas antes del partido, hizo
los cambios oportunos en su estrategia y se llevó el partido. Los depositarios
de la filtración fueron, curiosamente, Panocha Burgos y el “Manolo” Carreño.
Íntimos de Topor, para más señas. Espero que el vestuario del Madrid tome las
medidas oportunas y Ancelotti la procedente: Vado sanitario sobre los topos. La
más efectiva siempre ha sido la eliminación.
Franciscus: A Bale le queda un vía
crucis hasta finales de marzo. Tendrá que ser muy fuerte psicológicamente para
aguantar toda la inquina y bilis que le echarán, que será mucha, mucha, mucha.