Date por jod…. (fastidiado)

Dice el de Cruz y Raya eso tan célebre de "Si hay que ir se va, pero ir por ir es tontería". Pues eso pasa con el Madrid y el Mundialito. Ir hay que ir, pero es tontería, no va a servir para nada, ya les aviso. Salvo que el domingo la FIFA cambie al finalista Khasima por un combinado del Bayern, Juve y Chelsea este Mundialito no servirá para nada, para nada.

Si pierde el Madrid el ridículo será monumental, como no. Sin embargo, en caso de victoria, éste Mundialito pasará a la historia como la "Copa Toyota que le ganaron a los chinos". No es tontería, hoy ya he leído renombrar al Mundial de Clubs como el Trofeo Santiago Bernabéu Yokohama ¡¡toma ya!! Por tanto mi recomendación al Madrid es que jueguen la final, la ganen sin llamar mucho la atención - un 1-0 así como al desgaire - y vuelta a Madrid en vuelo turista, en varios grupos para no llamar mucho la atención. Y por supuesto nada de celebraciones ni alharacas, celebración íntima y familiar, como los sepelios de tragedias mediáticas.

Aunque debemos de convenir, como no, que es un torneo menor. La mejor prueba la dio hoy los mejicanos del América,  equipo ramplón y limitadísimo o ayer con el ridículo de los colombianos del At. Nacional ante los japoneses del Kashima, que para más inri es un simple invitado al torneo.

Para entendernos, un símil de esta competición sería como si el campeón de la NBA jugara un triangular con el campeón de Europa, de Asia y de Africa, y el equipo de la ciudad donde se jugara, no? Sería una distracción menor, casi un divertimento que no puede dar prestigio y sólo tendría riesgo de ridículo en caso de accidente fortuito. Pero aún y así, históricamente este trofeo ha sido reivindicado como prestigioso y cuando ha convenido, se ha incluido en la categoría de torneos internacionales junto a la Champions. Y eso es hacer trampas, así no vale.

Y es que una cosa es estar de acuerdo que el Mundialito, aka Copa Toyota, aka Mundial de clubes, aka Intercontinental sea un torneo de chichinabo, que lo es, y otra muy diferente es que cuando la gana mi equipo es otro título internacional más en las vitrinas y ya tenemos tantos como el Madrid y cuando es el Madrid quién se hace con él, se sonría con desdén y con un leve rictus de desprecio y amargor.

Por eso, amigos madridistas, el domingo, pase lo que pase, como decía el cura del chiste, dénse ustedes por jod…. fastidiados.