Real Madrid 1 – Osasuna 0
El Real Madrid inició la Liga en casa y Mourinho hizo de esta presentación real en el Bernabeu toda una declaración de intenciones. Ofreció a la afición blanca un compendio de que Real Madrid desea y como pretende ganar partidos y títulos. Y de paso acabar con tópicos impuestos por terceros interesados. Y ya se sabe que los tópicos suelen estar alejados de la verdad intrínseca de las cosas.
Para empezar utilizó sólo tres fichajes nuevos, Ozil, Khedira y Carvalho. Primer mensaje, por el hecho de fichar no se tiene seguro el puesto. Utilizó a Cristiano, Higuaín y Benzemá en punta. De ultradefensivo nada. Delanteros con vocación pero ojo, con obligaciones muy precisas en defensa. Segundo mensaje: el equipo juega de una forma cuando tiene el balón y de otra, muy diferente, cuando lo pierde.
Tercero: En defensa Ramos y Marcelo asumieron roles ofensivos, pero muy de tarde en tarde. Los carrileros se han acabado. Sólo sube uno y cuando tenga muy clara la superioridad táctica en la zona. En caso de duda, para atrás. Son los extremos los que asumen roles de amplitud de campo. Así va a ser difícil que Casillas vuelva a tener el record de paradas de la Liga.
Cuarto: Centro del campo. Khedira y Alonso ejercen labores de control táctico, basculando con libertad y obstaculizando la salida del balón contrario. Por tanto ocupan una amplísima zona. Se complementan y se superponen sin distinción. Su labor principal consiste más en el control que en la creación. Para eso está Ozil. Ozil tiene la grata tarea de asumir la creación y dotar de tempo al partido. Y ayer demostró que puede hacerle eterno el invierno a Kaká.
Y aquí quería terminar, en Ozil. Porque Khedira demostró que puede ser un todocampista potente, Carvalho que pese a su edad se encuentra con fuerzas de subir sesenta metros en pos de la ilusión, y por qué no, del gol. Y lo encontró. Pero Ozil me encandiló. Su partido de ayer fue una promesa de gloria, un ofrecimiento de clase y sabiduría futbolística innata, de algo que nace con uno y no puede ser entrenado. Y de esos futbolistas quedan pocos.
Demostró que posee el don que para mí enaltece a los más grandes jugadores: el control del tiempo, de la pausa, de ese segundo maravilloso donde parece que el terreno de juego, las piernas de los contrarios, el balón se eternizan, se alargan a voluntad, como si el realizador de Matrix se encargara de ralentizar la realidad. Fue el pause men, si se me permite el palabro.
Y en esa pausa que maneja, le permite disfrutar de ese medio segundo para estudiar que acción, que pase, que movimiento es el más adecuado, dejando que la clarividencia aflore de forma natural en su juego. No sé si será el fogonazo ilusorio del primer amor o el aura perenne del amor eterno, pero cuando terminó el partido sentí que ese mensaje ridículo de Florentino: “Ha nacido para jugar en el Real Madrid” le describía a la perfección.
Me gustó: Mourinho. Es el más listo de la clase, maneja todos los registros y sabe que decir, cuando y como.
No me gustó: Que Cristiano, recién salido de una lesión, con un día aciago y el partido controlado no fuera reservado en el segundo tiempo. Y los pitos de la afición. Hombre, en el primer partido en casa, no es de recibo pitar a los cuarenta minutos de un partido empatado, controlado y con toda la pinta de poder ganarlo, como sucedió.
Pepito Grillo: Decía Alfredo Relaño después de la primera jornada que esos dos puntos concedidos al Barca costaría sangre sudor y lágrimas recortarlos, dando casi por definitiva la brecha. Voila. En una jornada. Sorpresa. Un recién ascendido le hace un traje al supermegachuli Barca. Ultraje. Herejía. Esto no estaba en el guión ¿verdad?.
Rappel: El domingo que viene, estaremos más lejos aún. El Atleti espera con el colmillo afilado a los culés.
Pues ya estamos delante del Barcelona jeje. La verdad es que fue un partido bastante raro, pero siempre controlado. La fiabilidad defensiva es buenísima. Y en ataque estuvimos espesos en la primera mitad, peor luego aparecieron más ocasiones. Y tres puntos para la huchaca jeje.
ResponderEliminarSaludos desde La Escuadra de Mago
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ResponderEliminarLastima haberme perdido el partido para poder opinar mejor. Pero bueno, despues de haberme tragado todos los videoresumenes posibles y leerme las cronicas posibles del partido se puede decir que efectivamente se ve la mano de Mou por todo lo que detallas aqui, pero tambien es cierto que este no era precisamente el partido ideal para ensalzar la labor del equipo. Nos hace falta todavia mas tiempo, y sin embargo, ya tenemos la Champions a la vuelta de la esquina.
ResponderEliminarOzil, un crack, lo poco que pude ver por videoresumenes son para quitarse el sombrero. En cuanto a la actitud del Bernabeu...en fin, nada nuevo. A dia de hoy,la actitud del respetable es aquel del que paga y exige ver un buen espectaculo; y no el del buen aficionado que anima al equipo gane, pierda,juegue mal o bien...una lastima.
Un saludo desde La Naranja Merengue
Lo único que no me gusta o me preocupa es la falta de puntería, eficacia rematadora o la contundencia: no lo veo claro arriba. Ahora en defensa de miedo.-
ResponderEliminarEl Madrid es el mejor equipo del mundo, y, cuándo ''despuegue''...
ResponderEliminar@ Nico García
ResponderEliminarSi señor, ya vamos por delante. Algunos agoreros decían que nos iba a costar la vida superar esos dos puntos, pues nada.
@ The Idol
Respecto a los que van al Bernabeu, estás totalmente en lo cierto. Por tanto ¿no deberían de dejar de llamarse aficionados o madridistas'. Un madridista apoya a su equipo, un espectador ve y opina.
@ RVC
Teniendo tantas oportunidades y tan buenos delanteros, no hay miedo. Como dijo anoche Mou, algùn equipo acabará pagándolo. Ayer no lo hizo el Ajax de milagro.
@ Full Time
Cuando despegue llegará a su sitio: La cumbre del fútbol mundial.